Comprar láminas artísticas para tu hogar puede parecer un proceso estresante, pero es muy fácil decidir qué hacer. A menudo, la gente elige entre dos opciones a la hora de comprar arte: o eliges el arte que te encanta o eliges el arte que complementa tu espacio... o un poco de ambas.
Pero sea cual sea el nivel en el que te encuentres, ya sea que tengas una colección de 10 piezas o estés buscando tu primera impresión, Alex Liepman, fundador y curador principal de DROOL, cree que siempre debes comenzar por encontrar arte con el que tengas una conexión emocional, algo que te encante porque refleje tu gusto, estilo o personalidad. Luego, asegurarte de que la obra de arte complemente tu espacio puede ser una idea de último momento.
“El arte tiene el poder de marcar el tono de tu hogar y proporciona una base excelente para una paleta de colores. Por eso, al decorar un espacio, tiene sentido encontrar la obra de arte y luego elegir el color de la decoración. Lo que quieres es encontrar una obra de arte increíble que te encante, en lugar de ceñirte a los colores que ya hay en una habitación”, dice Alex.
Pero sea cual sea la ruta que elijas, hemos reunido algunos consejos útiles que sin duda te ayudarán en el proceso de toma de decisiones.
Encuentra una conexión emocional
Al fin y al cabo, es el dinero que tanto te costó ganar y del que te desprenderás al comprar una impresión artística, por lo que querrás poder mirarla todos los días sabiendo que te encanta y que te hace sentir algo. No importa si es inspiración, alegría o satisfacción. Mientras te dé una buena sensación o se adapte a tus gustos, encontrar esa conexión emocional es clave.
Quieres comprar obras de arte porque te encantan. Por eso, cuando busques entre las distintas opciones de impresión, la pieza elegida debe destacarse por ser única e intrigante. “Elige algo con lo que te conectes y no te equivocarás”, dice Alex.
Con demasiada frecuencia, la compra de arte se considera algo aterrador y que a la gente le da demasiadas vueltas, pero en realidad no tiene por qué ser así. El pintor Claude Monet lo resumió muy bien: “Todo el mundo habla de mi arte y finge entenderlo, como si fuera necesario entenderlo, cuando simplemente es necesario amarlo”.
Crea un 'flujo' con obras de arte que complementen tu espacio
(Aquí es donde las cosas se vuelven un poco más técnicas)
Usando color
En un nivel básico, esto significa pensar un poco en los colores tanto de la obra de arte como del espacio en el que pretendes entregarla. Al combinar colores, eliges colores que se complementen entre sí, ya sea combinando una obra de arte con tu esquema de colores existente o eligiendo dos o tres colores de la pieza y agregando acentos de esos en la habitación.
CONSEJO: Si no tienes un buen ojo para los colores, utilizar el círculo cromático puede resultar de gran ayuda. El uso de colores complementarios implica utilizar dos colores que están uno frente al otro en el círculo cromático. Por ejemplo, el naranja y el azul son dos colores complementarios que tienen sinergia. Los colores también tienen mucho que ver con la psicología y pueden cambiar los estados de ánimo y las emociones. Los colores cálidos, como el rojo, el amarillo y el naranja, pueden producir sensaciones de calidez, mientras que los colores fríos, como el verde y el azul, pueden ser relajantes.
Usando formas
Intenta repetir o combinar formas y ángulos en todo el espacio. Si tu habitación tiene superficies duras o bordes industriales, elige obras de arte que incorporen líneas y ángulos definidos. Mientras que si tu espacio tiene texturas suaves y muebles redondeados, puedes elegir obras de arte con ángulos o formas menos bruscas y más reconfortantes. Se trata de asegurarse de que nada desentone y que todo se comunique entre sí.
Manos a la obra: consejos paso a paso para comprar y colgar impresiones artísticas
Que comience la búsqueda
Dirígete a la tienda web y echa un vistazo... ¿hay alguna obra de arte que provoque emoción, que te sorprenda o que se adapte a tu gusto? Sea cual sea la habitación para la que estés comprando, es bueno pensar en la atmósfera que te gustaría crear. Algunos artistas tienen una energía audaz y ruidosa que se incorpora a todo su estilo y su trabajo a menudo encaja bien en entornos concurridos como cocinas y salas de estar. Las piezas más suaves y apagadas funcionan mejor en habitaciones en las que quizás quieras crear un entorno más tranquilo, como dormitorios y baños.
SUGERENCIA: Utilice el filtro para limitar el enfoque si hay un medio o tema en particular que le guste.
Mide las cosas a un tamaño mayor
Comienza examinando la pared o las paredes en las que piensas colocar las impresiones e intenta imaginar el diseño que podría funcionar mejor. Hay muchas opciones, así que sé creativo. Podrías hacer una pared de galería con varias impresiones más pequeñas o una pieza grande que llame la atención o quizás incluso dos impresiones horizontales de tamaño mediano. Asegúrate de tener en cuenta también los demás elementos de la habitación, ya que no quieres que se vuelva demasiado caótica.
Una vez que haya decidido dónde se colocará la obra de arte, debe determinar el tamaño, ya que muchas impresiones vienen en una variedad de tamaños.
CONSEJO: Para medir el tamaño, puedes encontrar un objeto doméstico que se asemeje bastante al tamaño de la obra. El cartón o el papel funcionan de maravilla para esto, ya que puedes recortar las dimensiones exactas de tu obra de arte y pegarlas en la pared. Esto te permitirá ver fácilmente a escala si es demasiado grande o demasiado pequeña para el espacio. Si optas por un marco, ten en cuenta también la profundidad desde la pared.
Hora de colgar
El último paso es encargar y colgar las obras de arte. Asegúrate de pensar bien antes de colgarlas, ya que querrás colocarlas en el lugar correcto antes de hacer un montón de agujeros en las paredes. Muchas veces es mejor colgar las obras de arte a la altura de los ojos. Parece obvio, pero la gente suele colgar las obras de arte demasiado alto, sobre todo cuando tienen techos altos. Así que, en caso de duda, haz lo que hacen las galerías y cuélgalas a la altura de los ojos cuando estén de pie.
A algunas personas les encantan las luces para cuadros, ya que creen que ayudarán a que sus obras de arte se destaquen. Pero en DROOL las odiamos porque interfieren con la obra de arte. Pero si insistes en algún tipo de iluminación adicional, te recomendamos luces empotradas, especialmente si son direccionales. De esa manera, puedes inclinarlas para iluminar la pared cercana sin que la luz incida directamente sobre la impresión.